Las obesidades localizadas o lipodistrofias localizadas se producen por un aumento desproporcionado del sector más profundo del tejido celular subcutáneo.
Es inútil seguir dietas hipocalóricas como tratamiento exclusivo. Inmediatamente a abandonarlas la obesidad localizada reaparece y a medida que pasan los años se instala definitivamente.
La única manera que existe para combatir las lipodistrofias es actuar directamente sobre el tejido adiposo genéticamente alterado.
Los dos procedimientos, la lipoláser y la lipoultrasónica son procedimientos diseñados para eliminar tejido graso localizado. Se asocian a la lipoescultura o lipoaspiración.
Se utiliza la ayuda del Láser Fox, un equipo laser Diodo de 980 nanómetros que permite derretir por calor la grasa del cuerpo para después poder ser absorbida con mayor facilidad y en mayores cantidades con microcánulas y una bomba de vacío.
El Liposound de la empresa Newpong, es un cavitador ultrasónico. Este equipo genera vibraciones de ultrasonido, 36000 ciclos o vibraciones por segundo, que se transfieren a la punta de cánulas.
Esta altísimo y rápida vibración genera una gran fricción en las moléculas de agua intracelular, provocando que las células grasas, el 85% del componente de las células grasas es agua, quede emulsificada, derretida.
Entonces mientras que el láser de diodo 980 nm Fox logra reducción del tejido graso derritiéndolo por calor o efecto térmico, el cavitador ultrasónico Liposound logra la reducción de la grasa a través de fricción o efecto mecánico.
Estos sistemas asociados a la lipoescultura permite poder aspirar más volúmenes y más selectivamente el tejido graso, sin lastimar otros elementos nobles como nervios, vasos y músculos.
El tratamiento definitivo es la extracción de ese tejido en exceso por medio de la aspiración con cánulas pequeñas (lipoescultura).
A su vez, tanto el láser diodo 980 nm Fox como el cavitador ultrasónico Liposound generan intenso calor a nivel del plano subdérmico con la consiguiente contracción de la piel.
Esto permite mejorar el contorno corporal y disminuir la flaccidez de diferentes sectores del cuerpo, sobre todo en aquellos sectores que es resistente a la dieta y el ejercicio.
Al licuefaccionar (derretir) la grasa previo a su aspiración con cánulas evita el trauma mayor y habitual del movimiento de la cánula y la resistencia del cuerpo al paso de la misma. Se logra así disminuir hematomas y sangrado postoperatorio. Consecuencia de esto también disminuyen los dolores postoperatorios y por lo tanto la inserción social y laboral es mucho más rápida. También al disminuir el sangrado se puede extraer mayores volúmenes de grasa sin peligro del desangrado del paciente.
Es un procedimiento que suele durar 1 a 2 horas, ambulatorio, bajo sedación profunda o anestesia general impartida por medico anestesiólogo y con reposo de 24 a 48 horas. En el postoperatorio se indica una faja que la paciente debe usar durante 15 días. Luego de ese periodo puede reanudar incluso actividad deportiva.
Dependerá de la magnitud del trabajo a realizar y de las áreas comprometidas.
Todos los Tratamientos y Procedimientos Quirúrgicos y no Quirúrgicos detallados en este sitio web son realizados exclusivamente por un Cirujano Plástico Miembro Titular de las Sociedades de Cirugía Plástica de Buenos Aires y Argentina, Matriculado y Recertificado en Capital Federal, CABA, Buenos Aires, Argentina.
El Dr Fabian Perez Rivera y su equipo solo realizan intervenciones quirúrgicas en clínicas o sanatorios que aseguren envergadura y complejidad necesaria para su tranquilidad, la de sus pacientes y la de los familiares de los pacientes. Instituciones que cuenten con: terapia intensiva, unidad coronaria, servicio de hemoterapia, laboratorio, servicio de diagnóstico por imágenes. Las instituciones elegidas son: Sanatorio de los Arcos, Clínica Adventista Belgrano y Sanatorio Otamendi.